Agróptimum: pistacheros de alto rendimiento con primeros frutos en solo tres años

Agróptimum, el joven grupo empresarial agroalimentario y biotecnológico, líder nacional en producción de planta y gestión de cultivo de pistacho y fundado por el emprendedor manchego Ángel Minaya en 2016, ha logrado que sus árboles de alto rendimiento den sus primeros frutos en tan solo tres años y medio. La primera cosecha ha producido un récord de más de 2 kilos de pistacho seco por árbol.

 Este dato contrasta con los habituales entre 8 y 9 años de media que tarda en desarrollarse una planta de pistacho en España, desde que se planta la semilla hasta que se obtiene el fruto.

 A nivel de rentabilidad, los datos de máximo rendimiento que deja la recogida de esta primera cosecha han duplicado las mejores expectativas del ambicioso plan de negocio, puesto que se esperaba recoger un kilo en seco inicial de fruto por árbol y se han obtenido 2,4 kilos.

Con la rentabilidad y la sostenibilidad de las plantaciones en el punto de mira, y el foco puesto en la homogeneización del fruto, Minaya y su equipo desarrollaron, hace tres años y medio, árboles de pistacho de alto rendimiento.

Su éxito se debe a dos grandes apuestas: una gestión de campo altamente innovadora con tecnología basada en la IA y el cuidado extremo del medio ambiente, y la irrefutable calidad de la planta injertada, la mejor del mercado gracias a su genética – que la convierte en la más resistente a la salinidad, las enfermedades y el frío-, a su sistema radicular, al cuidado en sus primeros meses de desarrollo y a su plantación en los primeros 12 meses de vida, para no perder tiempo.

A medio plazo, señala Minaya, la compañía inaugurará una planta procesadora para poner a la venta los frutos y algunos derivados del pistacho. “Con el tiempo y la inversión constante en I+D+i, será posible generar una variedad de pistacho propia, mejor adaptada aún al suelo español, con características únicas, que permitirán convertirlo en un símbolo de nuestra agricultura y, por extensión, un símbolo de nuestra cultura gastronómica, como tradicionalmente lo han sido los olivos y las vides.”

¿Cuál es el proceso?

Para que los árboles alcancen su máximo potencial es indispensable, primero, un proceso productivo en el laboratorio de I+D+i, en el que se selecciona y analiza al milímetro cada una de las semillas.

Después una gestión de vivero y de campo específica, desarrollada en exclusiva por Agróptimum: en sus más de 75.000 metros2 de viveros altamente tecnificados se lleva a cabo un control exhaustivo de cada planta, mediante cuidados manuales y tecnológicos, sumado a una constante monitorización de la temperatura, la humedad y la nutrición para conseguir un sistema radicular fuerte de cara a la llegada al campo.

Cuando las plantas de Agróptimum salen de los viveros de Villanueva de la Jara, siguen sometidas a un control minucioso, en lo que han denominado agricultura de precisión.

Esta gestión de la semilla desde el inicio, con una genética súper seleccionada y analizada en laboratorio y la estudiada gestión en campo es lo que permite mantener la elevada calidad de las plantas y sus características de homogeneidad – tamaño, grosor y perfecto sistema radicular- y lograr que den fruto en tan poco tiempo, batiendo récords en el sector, produciendo más de 2kg por árbol de pistacho seco.

La homogeneidad de la planta permite, una vez en campo, y gracias a la Inteligencia Artificial sincronizar las labores de cuidado y control para obtener su máximo rendimiento y la mejora de la rentabilidad gracias a la optimización de recursos hídricos, nutricionales y sanitarios.

Un ejemplo de ello es el ambicioso programa medioambiental LIFE-AIs: See & Save de la Unión Europea del que Agróptimum forma parte y que permite hacer el seguimiento de los cultivos a través de la captura de imágenes con cámaras 3D y su procesamiento con IA.

La exactitud de los datos generados a partir de la valiosa información visual, con un exigente grado de detalle, permite controlar el estado de las plantaciones al instante y ejecutar, al momento, tratamientos y tareas en campo, con gran exactitud. Este proyecto de agricultura de alta precisión conlleva significativos beneficios medioambientales y económicos.

Según Agróptimum, el secreto no es otro que la investigación constante. Técnicas de cultivo con valor añadido como nuevos sistemas de riego, nutrición, poda; cruce de variedades y aplicación de fitosanitarios… Todos los procesos que intervienen en el cultivo de la planta de pistacho están sometidos a un proceso de investigación continua por parte del equipo multidisciplinar de expertos en biología y en ingeniería, así como en desarrollo agrícola, de esta compañía.

Innovación y tecnología para la sostenibilidad

La sostenibilidad es uno de los pilares de este grupo empresarial y sustenta multitud de iniciativas con el objetivo de preservar el medio ambiente y la tierra, que es su modo de vida.

La fertilización responsable con productos sin recubrimiento plástico y con microorganismos para reducir el impacto de los abonos y proteger el suelo, el desarrollo de sistemas de recolección de agua de lluvia de viveros para abastecer las plantaciones, la reutilización de los plásticos y transformación de residuos orgánicos en sustrato, entre otras, certifican un uso sostenible de los métodos de producción, mereciendo, recientemente, la cerfificación de  Global G.A.P. una norma mundial para las Buenas Prácticas Agrícolas (BPA) reconocida por la Iniciativa Mundial de Seguridad Alimentaria.