'Es un gran reto demostrar que la España rural es una zona atractiva para jóvenes profesionales'

INTERPORC celebra su décimo aniversario, ¿qué valoración hacen de todos estos años y qué destacan de la trayectoria?

La valoración solo puede ser muy positiva. Hemos contribuido al gran desarrollo de los últimos años del sector porcino de capa blanca desarrollando múltiples campañas de publicidad y marketing; coordinando la presencia en multitud de ferias y eventos nacionales e internacionales; desarrollando un sello voluntario de bienestar animal con mayores exigencias que la propia normativa; hemos impulsado grupos de trabajo y campañas en materia de bioseguridad y gestión medioambiental; hemos conseguido dos récords Guinness y hasta nos hemos metido recientemente en la Queens League Oysho, acercándonos a las nuevas generaciones e interesándonos por sus preocupaciones.

Con todo ello, creo que hemos conseguido algo muy importante y que me parece totalmente necesario: visibilizar al sector porcino y a sus gentes, y poner en valor todo el trabajo que hacen las empresas, asociaciones y organizaciones que componen esta Interprofesional. Estamos orgullosos de nuestra gente, de nuestros ganaderos, industriales, veterinarios, científicos…al final, son cerca de 415.000 personas las que están detrás de esta organización y que en estos diez años han contribuido a nuestro éxito, que son un ejemplo de gestión moderna e implementación de nuevas tecnologías y que aportan mucho a la economía de España, sobre todo en las zonas rurales, justo donde más se necesita.

¿Cuál es el principal desafío que tiene la Interprofesional? ¿Qué objetivos a corto plazo se ha marcado INTERPORC para continuar su crecimiento?

Tenemos un propósito que es favorecer de forma ética y socialmente responsable el desarrollo de todos los agentes de la cadena de valor del sector porcino e impulsar una actividad ganadero-cárnica moderna y comprometida con el desarrollo de las zonas rurales, con la salud y nutrición de la sociedad, y con el futuro del planeta, de manera que permita alimentar a la creciente población mundial con productos sanos, seguros y de calidad, elaborados con el máximo respeto hacia las personas, los animales, los diferentes territorios y el medio ambiente.

Nuestro objetivo principal durante este año es conseguir trasladar a la sociedad y al público en general la verdadera reputación e imagen de nuestro sector, siempre desde la verdad, la honestidad y el aval científico, haciendo frente a las fake news y a todos aquellos que construyen una imagen irreal de nuestro sector.

¿Qué balance hace de las campañas de comunicación que se han llevado a cabo?

Desde el inicio tuvimos claro que, con nuestra comunicación, debíamos enamorar y convencer al consumidor en muchos temas y hacerlo siempre con la verdad y la honestidad por delante.

Y eso es lo que hemos hecho, en estos diez años hemos realizado varias campañas de comunicación, tanto en España como en el extranjero, enfocadas a producto, como por ejemplo, nuestra campaña de promoción Pork Lovers con la que hemos recorrido más de 21.000 kilómetros y hemos llegado a más de 80 localidades de España y de Reino Unido, logrando la visita de 21.000 personas a nuestra unidad móvil para conocer la realidad del sector porcino y las propiedades nutricionales de la carne de cerdo de capa blanca; otras campañas enfocadas a mostrar la realidad diaria del sector, como por ejemplo, a través de nuestro último spot de televisión “Saborea lo nuestro” para acercar los valores y el compromiso de los profesionales del sector porcino a la sociedad; y otras enfocadas a desmentir fake news, como nuestra campaña de promoción en la Unión Europea “Let’s talk about pork from Europe” para combatir falsos mitos y creencias que surgen en torno al sector a nivel europeo.

El bienestar animal y la sostenibilidad son temas que han llegado para quedarse y constituyen unas de las prioridades de los consumidores. ¿Cómo trabaja la interprofesional estos aspectos y qué importancia tienen?

Todo lo que sea hablar de bienestar animal y sostenibilidad con datos reales en la mano nos beneficia.

El bienestar animal lleva décadas trabajándose en el sector. No es algo en lo que nos hayamos puesto a trabajar ahora porque esté de moda, los profesionales del sector porcino llevamos años velando por nuestros animales, de ello depende nuestro trabajo. Aplicamos la normativa europea, la más exigente del mundo, y nos hemos dotado de un sello propio, “B+ Compromiso Bienestar Animal”, que nos autoimpone voluntariamente unas exigencias aún mayores. En este tema, es el sector porcino de capa blanca de España quien puede dar lecciones porque está en la vanguardia mundial.

Respecto a la sostenibilidad, está integrada en nuestro ADN tanto en lo económico, como en lo social y en lo medioambiental. Todas las inversiones en cada eslabón de la cadena buscan seguir mejorando en sostenibilidad porque, entre otras cosas, nos hemos marcado como objetivo el impacto climático neutro en 2050 en consonancia con lo establecido en el Pacto Verde Europeo.

¿Qué caracteriza al sector porcino a la hora de hacer frente a los cambios sociales y económicos?

Anticipación. Esa es la palabra clave. Estamos atentos a las demandas de la sociedad y nos adelantamos a ellas. Los consumidores piden ahora alimentos más sanos y sabrosos, pero el sector ya lleva años invirtiendo en I+D para ofrecer productos cada vez más saludables, con menos sal o grasas.

Por ejemplo, el consumidor demandaba mayores exigencias éticas a los productos y, por ello, trabajamos junto con 19 organizaciones científicas en un reglamento técnico de Bienestar Animal voluntario con mayores exigencias a la normativa actual e incorporando en nuestros grupos de trabajo a ONGs para conocer su punto de vista en esa anticipación.

¿Cómo contribuye el sector porcino al relevo generacional y desarrollo rural? ¿Por qué es tan importante la labor que realizan en el medio rural?

En INTERPORC, trabajamos para demostrar que en el entorno rural hay oportunidades de desarrollo profesional muy interesantes para jóvenes y mujeres. En este camino, el principal problema con el que nos encontramos es que los ataques infundados que recibimos han creado una imagen falsa que no se corresponde con la realidad de trabajar en el sector porcino.

Para nosotros, es un gran reto demostrar que la España rural es una zona atractiva para jóvenes profesionales altamente cualificados. Somos un sector que apuesta fuertemente por el talento joven; por la incorporación de la mujer al entorno laboral, con un 42% de empleo femenino; que está presente en municipios de menos de 5.000 habitantes y, una prueba de todo ese talento es la cantidad de jóvenes que ya trabajan en las diversas disciplinas del sector, como, por ejemplo, todos aquellos ingenieros agrónomos y veterinarios que trabajan en granjas modernas en las que se implementan los más altos estándares en materia de bienestar animal.

Tras estos diez años, ¿en qué cree que puede mejorar la Interprofesional?

Siempre hay recorrido de mejora y tenemos que estar con la mente abierta tanto al cambio como a todo aquello en lo que se pueda mejorar, y adaptándonos a los tiempos presentes y futuros. Por lo tanto, desde INTERPORC siempre estamos pensando en nuevos proyectos, nuevas ideas, formándonos y teniendo en cuenta también la evolución de nuestro sector. Prueba de ello, es que acabamos de finalizar un Plan Estratégico del sector porcino para los próximos 5 años y que condicionará el Plan Estratégico de la Interprofesional.

Por último, y de cara a estas nuevas elecciones, ¿qué le pediría al nuevo gobierno en materia agroalimentaria?

Tanto INTERPORC como el sector porcino, siempre ha estado colaborando y a disposición de la administración y de los estamentos políticos. Lo que nos gustaría poner como siempre encima de la mesa es que cualquiera que sea responsable tanto de los ministerios como del gobierno, tenga en consideración que somos un país agroalimentario, como las cifras así lo demuestran, un sector reconocido a nivel internacional por la calidad de sus productos y la seguridad alimentaria.

Somos un sector que se anticipa y va más allá del cumplimiento de las normativas y un ejemplo de ello, como hemos comentado anteriormente, es el reglamento en Bienestar Animal; un sector que se preocupa y se ocupa del medio ambiente y de la triple sostenibilidad (social, económica y medioambiental) pero en el que también es muy importante la sostenibilidad económica para construir un sector rentable y en el que los jóvenes y las nuevas generaciones se puedan labrar un futuro; y un sector al que le preocupan los hábitos de vida saludables y la educación de los jóvenes.

Por todo esto, es necesario generar resiliencia entre el medio rural, la ganadería y la industria con el estamento político, de forma que se tengan en cuenta todas estas cuestiones de gran relevancia para nuestro país.