28 DE julio DE 2021
Redacción Qcom.es
De plato de aprovechamiento a exquisitez culinaria. La lasaña es una de las recetas más populares de la gastronomía italiana que ha traspasado fronteras y que cada día gana más adeptos. Prueba de ello es que, según datos de la Asociación Española de Fabricantes de Platos Preparados (ASEFAPRE), el consumo de lasaña congelada en el hogar se incrementó un 6,2% en 2020, alcanzando las 9.269 toneladas consumidas.
De acuerdo con Álvaro Aguilar, secretario general de ASEFAPRE, una de las claves del éxito de esta popular receta se encuentra en su capacidad para deleitar a mayores y a pequeños. “La lasaña es un plato que gusta a toda la familia pero que requiere dedicación, y por eso contar con una opción lista para tomar, fácil y rápida de preparar, y a la vez sabrosa y nutritiva ha contribuido a que este segmento haya crecido en el último año”, señala Aguilar.
El origen de la lasaña, aunque incierto, es antiguo. Ya el mismísimo Cicerón escribió sobre su pasión por el “laganum”, un plato formado por tiras de pasta alargadas, e incluso hay versiones que aseguran que el vocablo proviene del griego “lasanon”. Sin embargo, lo más probable es que hasta el siglo XVIII no apareciese un plato similar a la lasaña al horno que conocemos hoy en día.
Aunque parezca una receta sencilla, su elaboración requiere de mucho tiempo y cierta pericia para lograr el punto perfecto. Según los expertos, únicamente para preparar una buena salsa boloñesa se necesitan entre tres y cuatro horas.
Para disfrutar de una lasaña sabrosa en su punto en pocos minutos, el sector de platos preparados innova constantemente y ofrece nuevas variedades que van desde su versión más clásica, elaborada con salsa boloñesa, hasta las más creativas de salmón, de espinacas y requesón, o de atún, entre otras propuestas, e incluso cuenta con propuestas elaboradas con pasta integral o con ingredientes vegetales.
Qcom-es © 2025 | Todos los derechos reservados