25 DE octubre DE 2022
Redacción Qcom.es
Trigo y agua son los principales ingredientes de la pasta, el alimento que durante siglos ha cautivado hasta el paladar de los emperadores romanos -Cicerón hablaba de su pasión por los tallarines- y que ahora sigue conquistando los hogares de cada vez más consumidores por su versatilidad.
De hecho, el consumo de platos preparados con base de pasta mantiene su trayectoria ascendente y, durante el pasado año, creció un 9,2%[1], alcanzando las 30.093 toneladas, según datos de la Asociación Española de Fabricantes de Platos Preparados (ASEFAPRE).
Su gran valor nutricional -contiene hidratos de carbono, proteínas y otros nutrientes fundamentales para llevar a cabo una dieta equilibrada-, unida a sus amplias posibilidades gastronómicas del gusto de toda la familia, son las claves de este incremento imparable en su consumo.
Aunque, a priori, elaborar un buen plato con base de pasta puede resultar sencillo, la realidad es que requiere de tiempo y de ciertos conocimientos culinarios, por lo que los platos preparados son una alternativa muy demandada.
“Para que los consumidores puedan disfrutar de sabores únicos de manera rápida y sencilla, el sector de platos preparados innova constantemente para ofrecer múltiples opciones listas para calentar y servir”, señala Álvaro Aguilar, secretario general de ASEFAPRE.
En este sentido, las empresas del sector ofrecen opciones perfectas para toda la familia incluyendo desde los clásicos platos, hasta la pasta elaborada a base de pescado, la fideuá, o recetas más sofisticadas, como los canelones con boletus. Además, el sector también ha trabajado para desarrollar versiones 100% vegetales de productos como la lasaña, de manera que lo seguidores de las dietas ‘veggie’ también puedan disfrutar de este delicioso alimento.
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