Comenzar la búsqueda
 

buscar

Búsqueda en los contenidos de la web
El punto de encuentro de la cadena agroalimentaria

Periódico Digital Qcom.es: El punto de encuentro de la cadena agroalimentaria

14 DE noviembre DE 2019

El sector pesquero solicita prudencia, coordinación y racionalidad

Redacción Qcom.es

El sector pesquero ha solicitado prudencia, coordinación y racionalidad en la definición y aplicación de políticas de creación de Áreas Marinas Protegidas (AMP) y ha defendido el uso de esta herramienta, en sus diferentes grados de restricción, siempre que esté basada en datos científicos y pueda ser gestionada y controlada. El sector pesquero se opone, sin embargo, al uso de esta herramienta como bandera propagandística de movimientos ecologistas que persiguen la protección de un porcentaje arbitrario de la superficie de los océanos: un 30% en 2030.

Así lo ha expresado Javier Garat, secretario general de Cepesca y presidente de Europêche, durante su participación en la cuarta reunión de la Alianza Latinoamericana para la Pesca Sustentable (ALPESCAS), que se celebra esta semana en la ciudad argentina de Mar del Plata.

Durante su intervención, en calidad de presidente de la Coalición Internacional de Asociaciones Pesqueras (ICFA), Garat ha reconocido que las AMP pueden ser una herramienta efectiva en el marco de los planes de gestión de la pesca, siempre que se adapten a las particulares realidades de las distintas zonas, ecosistemas y hábitats del océano, pero ha insistido en que la prudencia, la coordinación y racionalidad deben guiar su establecimiento que, en ningún caso, puede basarse en un enfoque único.

Según Garat, “las AMP deben considerarse una herramienta de gestión más, como lo son los TAC y cuotas, la gestión del esfuerzo pesquero, las vedas u otras medidas técnicas, para asegurar la convivencia entre una actividad pesquera gestionada de forma más eficiente y una explotación sostenible de los océanos y sus recursos”. Así mismo, las diferentes asociaciones integradas en ICFA coinciden en señalar los riesgos de poner un énfasis excesivo en el uso de esta herramienta y restar importancia y recursos al desarrollo de otros enfoques potencialmente más eficaces para dar respuesta a los problemas a abordar, garantizado la triple vertiente de la sostenibilidad: medioambiental, social y económica.

En este sentido, ICFA reconoce la utilidad de las AMP para proteger hábitats costeros específicos tales como arrecifes de coral, praderas marinas, posidonia y ecosistemas marinos vulnerables, pero no para solucionar las grandes y más apremiantes amenazas que suponen el cambio climático, la acidificación de los océanos y los contaminantes terrestres. Al contrario, y de acuerdo con ICFA, las AMP pueden contribuir al cambio climático y a la acidificación de los océanos al restringir la cantidad de proteína con baja huella de carbono disponible para el consumo; de modo que considera más conveniente invertir en otro tipo de políticas medioambientales que reduzcan la contaminación y frenen el cambio climático en lugar de en cerrar zonas a la pesca.

Qcom.es no se responsabiliza ni se identifica necesariamente con las opiniones expresadas por sus colaboradores, limitándose a convertirse en canal transmisor de las mismas