4 DE diciembre DE 2023
Redacción Qcom.es
El ‘I Congreso Internacional de Consumo. Alimentación, sostenibilidad y calidad’, organizado por la Unión de Consumidores de Galicia (UCGAL), ha reunido a casi un centenar de asistentes y más de 50 personas expertas y profesionales en Santiago de Compostela durante dos intensas jornadas en las que se debatió sobre el consumo de productos del mar, la calidad diferenciada y la sostenibilidad en el sector de la alimentación.
La gerente del Instituto Gallego del Consumo y de la Competencia, Sol María Vázquez, fue la encargada de inaugurar la última jornada del congreso. Vázquez destacó el rol protagonista de la ciudadanía a la hora de construir un sector más sostenible. “Los consumidores somos el motor de la economía verde, nuestros hábitos de compra son decisivos”, aseguraba esta mañana.
A continuación, Ana Mendoza, jefa de área de la Subdirección general de promoción de los Alimentos de España del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, presentó un panel sobre los hábitos de consumo postpandemia. Los datos constatan una progresiva reducción del volumen de compra al mejorar la planificación de las comidas, un ajuste de las necesidades al presupuesto y un incremento de compra de platos preparados y de pedidos a domicilio. Además, esto se refleja en una disminución del desperdicio alimentario.
En la primera mesa redonda, se analizaron las preferencias actuales y necesidades futuras de los consumidores. Se destacó la importancia de la adaptabilidad, la digitalización y la priorización de aspectos como la sostenibilidad y la salud en las decisiones de compra. También se enumeraron las mejoras a implantar en el etiquetado para hacerlo más accesible y se valoró la colaboración entre actores de la cadena como elemento clave para mejorar la competitividad y satisfacer las necesidades de la sociedad. “El cliente se ha vuelto más exigente y está más informado”, exponía Cristina Calvo, catedrática de Comercialización e Investigación de Mercados de la Universidade da Coruña (UDC).
El abogado e investigador en Derecho de las nuevas tecnologías, Miguel Vieito, fue el responsable de centrar la atención en la influencia de la inteligencia artificial en la decisión de compra del consumidor. “Un uso acrítico e inconsciente de los algoritmos en materia de consumo puede dañar los derechos del consumidor, pero también al propio mercado. En este caso, la potencia sin control no sirve de nada”, señalaba Vieito. Propuso soluciones como un sistema de fiscalización del algoritmo o los sistemas de top-down.
Seguidamente, la UCGAL presentó los resultados del estudio sobre hábitos sostenibles, elaborado junto a ConsumES. Según los datos desprendidos del informe, el 76% de las personas encuestadas dicen ser consumidores sostenibles. Aprovechar los restos o sobras para preparar otros platos, fijarse en el origen de los alimentos, usar bolsas reutilizables o separar y depositar correctamente los residuos son algunas de las acciones que se realizan con mayor frecuencia.
Sobre sostenibilidad en el sector de la alimentación versó la segunda mesa de la jornada. Los ponentes discutieron las normativas que promueven la responsabilidad ambiental y social en la producción y distribución de alimentos, los desafíos que enfrentan la agricultura y la ganadería para implementar prácticas más sostenibles, así como la gestión responsable de envases y la promoción de la economía circular. Verónica Marcos, presidenta de la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (FADEMUR) Galicia, puso de relevo el papel de las mujeres como transmisoras de “las prácticas más ancestrales” que a la vez “son las más sostenibles”. Instó a garantizar servicios tan básicos como internet para impulsar la innovación: “Para acceder a la tecnología, para innovar, debemos tener una conexión a internet decente”.
Tras el debate, Víctor Yuste Jordán, director general del Foro Interalimentario, quiso poner en valor el trabajo que realizó, y realiza, la cadena alimentaria por ser más sostenible. "Somos el país con los más altos estándares de seguridad alimentaria, un patrimonio gastronómico", señaló. Por su parte, Luigi Tozzi, director adjunto de SAFE Food Advocacy Europe, dio a conocer el etiquetado desde la óptica europea.
Con la participación activa del auditorio, Gumersindo Feijoo, investigador y catedrático de Ingeniería Química de la Universidade de Santiago de Compostela (USC), apuntó una batería de pequeños gestos para reducir el desperdicio alimentario.
El cierre del congreso corrió a cargo de Pedro Blanco Lobeiras, delegado del Gobierno en Galicia, y Rocío Arnoso, presidenta de la Unión de Consumidores de Galicia. “Un consumidor formado es un consumidor responsable desde el punto vista ambiental y social”, afirmaba Blanco. En su intervención, Blanco felicitó a la UCGAL por la organización del congreso y recordó que el gobierno es responsable de defender los intereses de las personas consumidoras, lo cual está haciendo a través de normativas como la Ley de Servicios de Atención al Cliente, que amplía los derechos de las personas consumidoras y mejora tanto los plazos de consulta como la resolución de incidencias.
Las aportaciones de la primera jornada
En la sesión del jueves se abordó el consumo de productos del mar y los alimentos de calidad diferenciada. La jornada abrió un diálogo constructivo sobre la intersección entre la innovación y la tradición en la industria pesquera, y las prácticas sostenibles asociadas o el acceso equitativo y responsable a los recursos marinos.
Por otro lado, respecto a los alimentos de calidad diferenciada, varias Denominaciones de Origen Protegidas e Indicaciones Geográfica Protegidas como la DOP Ribera del Duero, DOP Mexillón de Galicia, DOP Queso Idiazabal, IGP Ternera Gallega y DOP Aceite Oliva Estepa dialogaron sobre el impacto de este reconocimiento en la economía local, como se adaptan a las nuevas tendencias de consumo y sus expectativas a futuro.
Desde la Agencia Gallega de la Calidad Alimentaria (AGACAL), su director, José Luis Cabarcos Corral, destacó la asociación de la "marca" Galicia con los productos alimentarios, tanto del campo como del mar, se percibe como un sinónimo de calidad, tradición y autenticidad y llamó a aprovechar y poner en valor este vínculo.
Con representantes del Ministerio de Agricultura y Pesca, el CRAEGA, Intereco o Ecovalia, entre otros, esta sesión resaltó la importancia de mantener la integridad y el legado de los alimentos únicos, fomentando una apreciación más profunda y un compromiso con la autenticidad y el territorio en la era globalizada.
Qcom-es © 2024 | Todos los derechos reservados