Eugenia R. Palop accede a la Comisión de Agricultura

Redacción Qcom.es

La jefa de la delegación de Podemos en el Parlamento Europeo, Mª Eugenia R. Palop, se ha convertido este martes en miembro de pleno derecho de la Comisión de Agricultura y Desarrollo Rural del Parlamento Europeo (AGRI). Su incorporación a este órgano se produce tras la marcha de sus integrantes británicos a consecuencia del Brexit.

La Comisión AGRI contribuye de forma significativa a configurar la Política Agrícola Común (PAC), así como las políticas de la UE en materia de salud y bienestar de los animales, la fitosanidad, la calidad de los productos agrícolas, la silvicultura y la agrosilvicultura (regulación sobre el uso y cuidado de los bosques, las tierras dedicadas a la agricultura y la ganadería). El grueso de su trabajo se lleva a cabo mediante la elaboración de informes sobre propuestas legislativas para su aprobación en el pleno del Parlamento Europeo.

"Sólo hay dos representantes de Extremadura en el Parlamento Europeo [ella y Nacho Sánchez Amor, del PSOE] y era importantísimo que uno de nosotros pudiese defender los intereses de Extremadura en uno de los sectores prioritarios de la región", ha señalado la eurodiputada, natural de Llerena. "El sector agrícola produce gran parte de nuestra riqueza, pero también sufre la despoblación, la falta de oportunidades para los jóvenes y largos periodos de sequía".

Una de sus prioridades en la Comisión será "la defensa de una PAC que mantenga la asignación presupuestaria en la medida de lo posible tras la salida de Reino Unido de la UE", además de un reparto justo de las ayudas, con mayor apoyo a las pequeñas y medianas explotaciones frente a grandes propietarios, ayudas específicas para el acceso de los jóvenes a la tierra y la sostenibilidad ambiental de las actividades.

"Los agricultores no solo resisten a las inclemencias del tiempo, sino también a bajadas de precios hasta límites insostenibles", ha añadido, recordando las movilizaciones del sector en las últimas semanas y la necesidad de fijar precios mínimos. "El sector olivarero en concreto es uno de los más sensibles a los aranceles de Estados Unidos, y sus precios no han dejado de caer hasta alcanzar la cifra más baja en 40 años".