12 DE diciembre DE 2023
Ricardo Migueláñez. @Rmiguelanez
De nuevo la relación entre la alimentación y la salud está revolucionando internet con la aparición de un estudio sobre un alimento que viene a contradecir lo que siempre se decía o escribía y muchos usaban para criticar, en este caso a los productos del cerdo.
Y me refiero a los torreznos. Recientemente, multitud de medios de comunicación están haciendo referencia a un artículo publicado en la revista científica Plos One sobre estos productos que está dando mucho de que hablar sobre las propiedades saludables que tiene este alimento que, para muchos, con cervecita o sin ella, es una delicia.
Según el supuesto estudio, el equipo de la investigación ha calificado a los torreznos de manjar y joya gastronómica de nuestro país, como un alimento que podría ser más saludable que algunas verduras y hortalizas como las espinacas, la coliflor o las zanahorias. Y se debe a la composición que tienen a nivel nutricional, ya que algunos de sus aportes tienen beneficios para la salud por si mismos y está comprobado. Lo que sí que aporta y estoy seguro es felicidad.
Al parecer, esta investigación clasifica los alimentos dependiendo de cómo pueden ayudarnos a alcanzar los objetivos nutricionales para prevenir o reducir determinadas enfermedades, siendo este alimento positivo para mantener la salud cardiovascular o mejorar la respuesta del sistema inmunológico. Y es que, seguro que es así, aunque ya se han apresurado algunos a criticar el estudio, porque este tipo de cosas les desmonta su negocio, pero volvemos a lo de siempre. No hay que abusar de nada.
El problema es siempre el mismo, ¿es bueno un alimento, es sano, es ‘insano’, es malo? Y yo siempre digo lo mismo, no hay alimentos malos o buenos, si no una dieta equilibrada. El consumo excesivo de todo, incluido los torreznos, es perjudicial para salud, ya que puede contribuir al aumento de grasas saturadas, pero en su justa medida, el torrezno es una grasa cardiosaludable, ya que es rica en ácido oleico, un ácido graso monoinsaturado de la serie omega 9, que también se encuentra en aceites vegetales como el aceite de oliva o el aguacate. ¿A que estos no son malos?
¿Cómo vamos a avanzar como sociedad si gran parte del bombo de esta noticia es porque muchos se sorprenden porque consideran al torrezno un producto ‘no saludable’? Por favor, abramos nuestras mentes a la ciencia, a la alimentación y demos vía libre al torrezno, eso sí, con moderación. Y, sobre todo, abramos la mente al disfrute, porque si nos prohíben tomar de todo, como dice un amigo, eso es la muerte en vida.
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