2 DE noviembre DE 2015
Redacción Qcom.es
Carrefour ha comenzado a ver la luz al final del túnel en España. Pero la crisis le ha pasado una factura muy alta. La cadena de hipermercados y supermercados francesa registró el pasado año un cifra de negocios neta en nuestro país de 7.333 millones de euros. Son apenas 22 millones menos que un año antes. Una caída de tan sólo el 0,3 por ciento. Y, sin embargo, supone el sexto año consecutivo en el que caen sus ingresos, dejando a la empresa prácticamente al mismo nivel de negocio que tenía hace una década.
Las ventas de Centros Comerciales Carrefour se han reducido un 18,8 por ciento desde el año 2008, punto de salida de la crisis. Desde entonces, los ingresos de la compañía han disminuido así en 1.706 millones de euros, sin que la empresa haya sido capaz de ponerle freno. Ni el diseño de un nuevo concepto de hipermercado, al que se denomino Planet, ni la apuesta por supermercados de proximidad con cadenas como Market o Express, han conseguido dar la vuelta a la situación.
El gran problema de la filial española de Carrefour, más allá de la caída del consumo y de la crisis económica, es que no ha sabido dar con el modelo que ponga freno a sus grandes competidores en el segmento de los supermercados, liderados por Mercadona y, en menor medida, por Dia.
Mientras las ventas de Carrefour no paraban de caer entre 2008 y 2014, las de Mercadona han aumentado en casi 4.200 millones de euros, lo que supone que el año pasado ingresó casi un 30 por ciento más que al inicio de la crisis. En 2014 la cadena de supermercados valenciana alcanzó así un volumen de negocio de 18.441 millones de euros, lo que representa mucho más del doble que la francesa.
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