27 DE noviembre DE 2024
En este estudio, la CE concluye que estos Planes Estratégicos tienen potencial para contribuir significativamente a los objetivos climáticos en el sector de la tierra, con una posibilidad de mitigación estimada de hasta 31 millones de toneladas de CO2eq al año, principalmente debido a la captura de carbono y a la reducción de emisiones del suelo.
Prácticas agrícolas como la rotación o diversificación de cultivos, la expansión de los cultivos de cobertura y la conversión a la agricultura orgánica o ecológica son las que más contribuyen al potencial de mitigación estimado, con un 78% del potencial total.
Por su parte, en términos de instrumentos de la PAC, los esquemas ecológicos (ecorregímenes, principalmente) representan el 38% del potencial de mitigación estimado, mientras que los compromisos ambientales y climáticos en el marco de las intervenciones de Desarrollo Rural, otro 30%.
El análisis indica, además, una posible contribución positiva a la protección de los sumideros de carbono existentes de 29 millones de toneladas de CO2eq al año en los 19 planes estratégicos de la PAC que abarca el estudio.
El apoyo al mantenimiento de la agricultura ecológica representa más de la mitad (54 %) del potencial de protección estimado, seguido del mantenimiento (o gestión) forestal (22 %) y la protección de los pastizales (18 %).
La CE señala que los potenciales de mitigación y protección se estiman anualmente, por lo que podrían alcanzarse todos los años entre 2023 y 2027.
La realización plena de estos potenciales y la magnitud de su contribución a los objetivos climáticos de 2030 dependerán de la adopción final de las medidas y de su adicionalidad anual también en comparación con el período de programación de la PAC anterior que, según reconoce la CE, no es posible evaluar en esta etapa.
El análisis resultante establece un punto de partida para el desarrollo de una metodología más refinada utilizando datos de los Estados miembros sobre la adopción real de medidas y coeficientes de mitigación más precisos para las prácticas agrícolas apoyadas.
Por otra parte, este resultado puede contribuir a la reducción del elevado nivel actual de incertidumbre en el Inventario nacional de emisiones y absorciones en el sector de la tierra.
Recomendaciones
El estudio incluye recomendaciones dirigidas a las autoridades nacionales a este respecto. La Comisión sigue trabajando y colaborando estrechamente con todos los Estados miembros para mejorar la acción, el seguimiento y la presentación de informes relacionados con los planes estratégicos de la PAC y la mitigación del cambio climático.
El Informe de situación sobre la acción climática 2024, publicado por la Comisión Europea en octubre pasado, muestra que las emisiones agrícolas disminuyeron un 2 % entre 2022 y 2023, manteniendo o aumentando su producción para garantizar la seguridad alimentaria de todos los ciudadanos de la UE.
Según la CE, se está trabajando para seguir avanzando, en particular en el secuestro de carbono.
Actualmente, los planes estratégicos de la PAC destinan el 32 % del presupuesto asignado a acciones voluntarias que promuevan los objetivos medioambientales, climáticos y de bienestar animal.
El 35 % de las tierras agrícolas de la UE deberían beneficiarse de acciones tanto para el secuestro de carbono como para la reducción de las emisiones de óxido nitroso.
También se ha avanzado en la protección de la gestión sostenible de los recursos naturales, con esfuerzos sustanciales en materia de protección del suelo, con prácticas voluntarias que cubren el 47 % de las tierras agrícolas de la UE.
Más allá de la PAC, muchos fondos de la UE, como LIFE, Horizonte Europa (en particular la Misión Suelo) y los Fondos de Cohesión están disponibles para fomentar la eliminación de carbono.
Por último, la Comisión recalca que la UE tiene la ambición de alcanzar la neutralidad climática en 2050. En este sentido, todos los sectores deben desempeñar su papel, incluidos la agricultura y el sector agrario en su conjunto, reduciendo las emisiones y contribuyendo a aumentar su función de sumidero de carbono de la UE (en los suelos, en las características del paisaje, etc.).
De cara a 2050, la CE considera fundamental evaluar el impacto de las políticas para que los Estados miembros puedan programar medidas adecuadas que les permitan encaminarse firmemente hacia sus objetivos climáticos.
El estudio publicado por la CE analiza la posible contribución de 19 Planes Estratégicos de la PAC, que abarcan a 18 Estados miembros, a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI); a la mejora de la absorción de carbono y a la conservación de las reservas de carbono existentes.
Establece, por primera vez, el vínculo entre los instrumentos previstos en los Planes Estratégicos de la PAC por los Estados miembros y su potencial de mitigación a escala de la UE.
Pero, sin embargo, no tiene en cuenta la contribución de otras políticas y medidas aplicadas en los Estados miembros más allá de los planes estratégicos de la PAC, ni su potencial de mitigación y protección.
Estimaciones aproximadas
El proceso de estimación proporciona estimaciones aproximadas con niveles de incertidumbre que dependen de la información disponible en los CSP, es decir, en los denominados Coeficientes de Mitigación aplicados y en los supuestos realizados para estimar el área en la que se aplica la práctica agrícola.
Los 18 Estados miembros abarcan en conjunto el 92 % de la superficie agrícola utilizada europea y engloban alrededor del 95 % de las emisiones estimadas de GEI de la UE procedentes de la agricultura.
Los Estados miembros incluidos son Austria, Bélgica, Chequia, Dinamarca, Finlandia, Francia, Alemania, Grecia, Hungría, Irlanda, Italia, Letonia, Países Bajos, Polonia, Portugal, Rumanía, España y Suecia.
Los 31 millones de toneladas de reducción de CO2 como contribución potencial anual estimada de los 19 Planes Estratégicos de la PAC se distribuyen entre 9 millones de reducción de emisiones de GEI y otros 22 millones de secuestro mejorado de carbono por año.
Estos efectos potenciales anuales estimados representan respectivamente el 2,6% de las emisiones estimadas notificadas en el marco del Formato Común de Notificación (CRF) del sector 3 de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) – Agricultura en 2021 para la UE-18, y el 10,9% de las absorciones netas estimadas notificadas en el marco del Sector 4 del CRF-LULUCF (Land Use, Land-Use Change and Forestry), uso y cambio en el uso del suelo agrícola y forestal.
Al mismo tiempo, representan el 43% de la diferencia entre los niveles de emisiones de 2021 y la cifra asociada a la agricultura para 2030, así como el 56% del aumento necesario en la capacidad de sumidero para alcanzar el objetivo LULUCF 2030, para la UE-18.
El estudio de la CE se completará ahora con la incorporación de los 9 Planes Estratégicos restantes de la PAC, que está prevista para principios de 2025.
Mientras tanto, la CE ha puesto en marcha actividades de desarrollo de capacidades, en las que participan las autoridades pertinentes de los Estados miembros para formar a expertos nacionales en la aplicación de la metodología del estudio a fin de mejorar la precisión de las estimaciones.
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