Desprestigiar que algo queda...

Ricardo Migueláñez. @Rmiguelanez
 

Volvemos de vacaciones y retomamos ya la actividad que teníamos antes de que gran parte de España se fuera, para recuperar desde aquí los temas que son de interés para el sector alimentario de nuestro país. Y empezamos con uno que es básico para mi, la alimentación.

Cuando algunos quieren atacar al sistema actual de producción de alimentos se dicen muchas cosas relativas a lo que contaminan, lo que generan, lo que producen todo negativo claro y también se habla de “alimentos insanos”.

Llevo tiempo leyendo en internet titulares y artículos que alertan sobre los alimentos peligrosos para la salud a los que denominan en casi todos los espacios ‘insanos’. Y yo me pregunto, ¿cómo puede haber en la sociedad actual alimentos insanos con el sistema regulatorio que tenemos a nivel de la EU?

Yo creo que no los hay, pero los que utilizan esta nomenclatura lo hacen con una intención clara: perjudicar la imagen de los productores de alimentos y al mismo tiempo confundir al consumidor sin darle la información necesaria.

Creo que todo parte del desconocimiento que tiene la gente sobre cómo se producen los alimentos y su calidad, y los que quieren atacar a los productores de alimentos se aprovechan de ello. Porque la gente no conoce, y cuando no se sabe, con toca la información que ronda hoy en día por Internet, puede llegar a imaginarse cualquier cosa.

Cuántas veces habré leído eso de que el azúcar es malo, la sal es mala, tal o cual producto mata (este titular lo he visto ya algunas veces en “medios serios”, y muchas otras perlitas más). Si nos basamos en esa afirmación, las verduras y las frutas son alimentos ‘insanos’, ya que contienen azúcar. Y lo mismo pasa con otros alimentos, como el queso, los fritos, o incluso la carne, que tanto se demonizan. Pero son afirmaciones que siempre tienen un interés oculto y otro menos oculto, que es perjudicar la imagen de los productores de alimentos.

No hay alimentos buenos o malos, sanos o insanos, si no una dieta equilibrada y ejercicio físico, esa es la clave. Porque estar o no sano no es cosa de comerse una manzana o un bollo un día, si no de la cantidad en la que lo haces, y muchos de los que se consideran “alimentos sanos” podrían no ser buenos si no se toman en su justa medida.

En definitiva, si realmente hay (que no los hay) alimentos insanos, que actúen las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y los retiren del mercado, pero me da a mi que cuando se utiliza este término es más una estrategia de desinformación y de devaluación de los productores que otra cosa. E incluso podría ser una estrategia para desprestigiar un producto y poner el valor otro, por una entidad que tienen capacidad económica de influir sobre los medios con artículos sobre tal o cual producto. Quién sabe.

Empecemos a concienciar a la sociedad de cómo sacar el máximo partido de una dieta equilibrada, y nos irá a todos mejor con una sociedad informada. Porque recordemos, “Si yo no produzco, tu no comes”.